Rosario cuenta que los encontró la comodidad de sus voces al cantar, como una casualidad. Pero ya sabemos que las casualidades no existen. Con Julián se encontraron, y luego de muchas charlas, crearon un dúo y grabaron un disco sobre la guerra y el amor.
El amor es una de las palabras que más repetimos y, al mismo tiempo, una de las que nos resulta casi imposible definir. O peor aún, cada quien entiende algo diferente al pensar en ella.
Sin embargo casi no hablamos del amor con seriedad, ni de las relaciones de pareja, o el poder del hombre machista por sobre la mujer en nombre del amor, ni de como dotarnos de herramientas para eliminar esa violencia.
No abordamos las formas de relacionarnos como parejas. A l@s niñ@s y adolescentes no les hablamos del amor. No existe la educación emocional. ¿Para que educamos? Para trabajar, jamás para vivir el amor.
Suena cursi ¿no?
Deja de serlo cuando asumimos que la principal causa de femicidios está relacionada de manera directa con el amor. De nuevo: la principal causa de muerte de personas por su condición de ser mujer, contiene al amor como excusa. Y no es una exageración.
En más del 95% de los casos la víctima conocía a su victimario y en más del 70% era su pareja, o ex pareja. Se usa al amor como excusa para la violencia, al igual que se usa la guerra como excusa para la paz.
Si miramos un poquito más fino, podemos ver que en realidad el amor es la excusa para ejercer el poder machista. Pero ese poder responde a siglos de construcción de un orden social que llevará mucho tiempo desandar.
¿Qué hacemos mientras tanto? Podemos intentar desarmar la excusa que usa ese poder para violentar. Educar y reeducarnos en el amor y las relaciones amorosas.
En ese camino algunas pensadoras están intentando encontrar, no solo, herramientas y respuestas, sino también aportar formas concretas y cotidianas. La española Coral Herrera es una de ellas, cuando por ejemplo (nos) pregunta ¿Cómo usas tu poder?
Desde hace mucho mucho tiempo la cultura se ocupa de educarnos en el “mal” amor. Cuentos, novelas, leyendas, corrientes filosóficas, religiones, películas, series, dibujos animados, y por supuesto, la música.
Otras formas del amor no solo son posibles, son urgentes. Cómo también lo es que nos las cuenten y las canten, todas formas de construir los mundos posibles.