“…almas bailan en la luz
ríen lagrimas de piel
donde esta tu canción
donde muere el dolor…”
Elefantes en Europa – Divididos
Es el momento, el momento en él.
Se revela la imposibilidad en el tiempo y descubre la pieza inexistente: la máquina anda. Los suspiros se alcanzan desde el fondo. Solos se palpan al ojo rugoso del destino y aunque sepan que no es verdad, la maldición es recurrente.
La espera es el mal que condiciona, es la pluma que rebalsa el vaso medio vacío, y nos permite acomodar las sillas del jardín para preocuparnos de lo mediato y, sin poder, acomodar los cajones repletos de inútiles certezas.
Cuando espero el derrumbe, otra mariposa aparece y duerme despacio, en el borde de los días, apenas vuela. Sin atravesar más que las propias alas.